"La creación de la primera Agencia Espacial Mexicana es de gran importancia para el desarrollo tecnológico de nuestro país, ya que México cada vez pierde más competitividad a nivel mundial, cae del nivel 36 al 58, según The Global Competitiveness Report del World Economic Forum, a causa del rezago tecnológico que existe en el País."
Ese es el argumento para justificar tan absurdo gasto de dinero, inicialmente para empezar a formarla tendrá un costo de 120 millones usd.
Lo curioso del caso, es que no se me consultó para tan importante proyecto, como siempre, todo lo empiezan mal. Si me hubieran consultado, les diría que yo conozco algo tan especial, tan único, es algo que es capaz de ponerlo a uno en órbita, es capaz que uno despegue como cohete, impulsado por los más grandes sueños y anhelos.
Por supuesto, es algo mucho, pero mucho más valioso que los 120 millones que pretenden gastar. Pero eso sí, es garantía total de poder no solo alcanzar las estrellas, es la garantía de poder conocer realmente de que está compuesta una estrella.
Una estrella que posee un gran brillo, un gran atractivo, una estrella que posee incluso, gran inteligencia, una estrella que aún en los días nublados, los días obscuros, o incluso, en los días radiantes de sol, posee un brillo capaz de iluminarlo todo.
Es una estrella que yo he llamado Araceli, conocerla a ella, es conocer los firmamentos más lejanos, las cosas más increíbles de este universo.
Es pues, una estrella vestida de blanco, que en estas horas de una noche de domingo, en su obscuro pelo duerme la noche aún. Y en lo hondo de sus pupilas, yacen dormidos los astros.
Pero como siempre, en México, todo llega tarde, esa estrella, su belleza ya había sido descrita en esta canción, una canción de amor de la era espacial...
En fin, fue un domingo tranquilo, aunque no la extrañé, bueno, la extrañé sin tanto drama, por que es difícil pasar un domingo sin pensar en ella. Siempre hay cosas agradables de los domingos que me hacen recordarla, incluso, cosas tan sencillas como un partido de football. Siempre hay una oración en la homilía dominical que se hace pensando en ella. Los domingos, no pueden pasar sin pensar en ella, sin embargo, no fue tan dramático, basto un simple "cuídate mucho" para mantener una sonrisa, que hasta el momento, aún no se ha apagado.
Y para contagiarle esta sonrisa, y que ella empiece su semana sonriendo, le dejaremos otra canción especial para ella, una simple canción que dice: "sonríe". Por que cuando sonríe el mundo se ilumina, cuando sonríe, todo es más sencillo, todo se aprecia mejor. Así que SONRIE ARACELI:
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